Los interrogantes de Rory McIlroy para el fin de semana del PGA Championship
Rory McIlroy ya está ahí, en lo más alto. Otra vez lo ha vuelto a hacer, ha metido birdies, eagles y lo que hiciera falta para llegar a la posición número uno en la clasificación provisional. No parece fácil que Lee Westwood, Jim Furyk, o cualquiera de los tipos duros que vienen por detrás en la clasificación, le amarguen el final de la jornada del viernes.
Rory McIlroy es el jugador del momento, sus resultados de las últimas semanas le avalan. Su victoria con autoridad en el Open Championship y su remontada para ganar el Bridgestone Invitational, hacen que sea hombre a batir, el referente para todos. La pregunta es hasta cuándo y, viendo lo que lleva jugado en estas dos primeras jornadas del PGA Championship, si aguantará o no en las dos que restan.
Esto es América, le dirán los Jim Furyk, Rickie Fowler, Ryan Palmer y algún jugador estadounidense que pueda jugar una buena vuelta mañana y meterse en el grupo de los que el domingo tengan opciones. Es la tierra de los que sueñan y consiguen cosas. Bien podría ser el segundo major del año para Rory McIlroy, o bien una victoria para cualquier otro jugador de los que le siguen. Así terminaba Rory su segunda vuelta en el hoyo 9 (empezó por el 10).
Las preguntas que muchos tenemos son: ¿hasta cuándo van a seguir entrando así de fácil todos los putts que tira? ¿Cuándo dejará de saber reaccionar a los bogeys y doblebogeys con golpazos, birdies y eagles? ¿Hasta cuándo durarán la confianza y la sensación de ser un golfista superior a los demás?