Hace ya un par de días en los que comentábamos que el 70% de los jugadores con licencias no habían jugado ni un sólo torneo en el año 2015, un dato duro y que en su momento ya nos hizo plantearnos sobre la obligación de tener que tener un hándicap para jugar ,si realmente no vas a competir.
Otra de las preguntas obvias que rondaba por mi cabeza, era la de saber, cuántos jugadores en España juegan realmente con cierta frecuencia al año, y para ello, el Sistema de Hándicaps EGA nos podía brindar una buena ayuda, ya que si supiésemos el número de hándicaps activados, podríamos limitar bastante bien el número de jugadores que al menos han jugado cuatro vueltas válidas durante el año 2015 y lo transcurrido en 2016.
Tras haber pedido el dato de jugadores con hándicap activo a la fecha a la propia Real Federación Española de golf, me han confirmado que a fecha de 22 de Febrero del 2016, sólo tienen el hándicap activado 62.867 golfistas, lo que implicaría que desde enero del 2015 al menos han jugado las famosas cuatro vueltas válidas.
El utilizar ese número como determinante del número de jugadores activos, nos obliga a sumir un cierto error, como que puede haber jugadores que jueguen torneos por parejas en modalidad greensome o modalidades match play, y alguna prueba suelta en pruebas valedaderas, pero sin llegar al mínimo de cuatro vueltas válidas.
En una situación como la anterior, si damos como válido el número que Hugo Costa comentó en On The Tee, que 200.000 jugadores no habían jugado ni un torneo, estaríamos hablando que aquellos que al menos jugaron alguno pero sin llegar a las cuatro vueltas válidas serían unos 14.900 golfistas.
Por lo que los números del golf español, en cuanto a competición se refiere serían los siguientes:
- La mayoría de jugadores de golf en España , sobre el 70%, no juegan campeonatos.
- Sólo el 22,63% juegan campeonatos con cierta frecuencia, al menos cuatro vueltas de las consideradas válidas por el Sistema de Hándicaps EGA
- Alrededor del 5% de los aficionados al golf, han jugado al menos alguna vuelta, sin llegar a las cuatro vueltas.
Lo decía el otro día y lo vuelvo a repetir ahora, con estos número en la mano, menos de la cuarta parte de los clientes de la Real Federación Española de Golf, son clientes que realmente están obteniendo el valor que la RFEG da la licencia, el mantenimiento del hándicap, el poder competir, etc. Lo que realmente, nos tendría que hacer pensar sobre la obligación o no de estar federados para poder salir al campo de golf.
La RFEG sabe la importancia que tiene la competición para engancharnos a este deporte, pero visto lo visto, de esa gente hay poca entres sus afiliados. Sí, la competición engancha si te gusta competir, si quieres ver tu hándicap reducido, pero si la gran mayoría de tus federados no compiten, por algo será.
Leía el otro día que el golf es una de deporte que realmente consume tiempo y recursos y en los que la gran mayoría de sus aficionados son realmente malos. No lo podemos negar, basta con ver la distribución de hándicaps que mostrábamos el otro día, donde podemos ver que sólo el 7,15% de los hándicaps pertenencen a primera o segunda categoría.
Para mí este es quizás el verdadero problema del golf, que es un deporte caro, que consume tiempo y que además necesita mucho más tiempo y dinero, para poder llegar a ser un jugador de cierta calidad, mientras que lo que veo yo en mi club, es gente que llega con prisas al campo, que no se les ocurre tirar bolas y que lo único entrenamiento que hacen son las vueltas con sus amigos o de competición, haciendo una y otra vez lo mismo y esperando obtener distintos resultados.
Jugadores que por su condición física tienen ciertas disfuncionalidades para poder hacer un buen swing de golf, jugadores que hace años que no reciclan su swing ni tienen visos de hacerlo, jugadores en fin, que su único objetivo con el golf, es intentar pasar el rato y divertirse si los astros se alienan para que la cara del palo llegue cuadrada al impacto ese día y poco más.
Nada contra este tipo de jugadores, pero quizás la RFEG se debiera de dar cuenta, que quizás el mayor esfuerzo se tendría que hacer en que los jugadores nóveles puedan llegar a tener un cierto nivel como para salir al campo lo más rápidamente posible, porque aunque me paso horas y horas en el tee de prácticas, lo que realmente considero que engancha es el campo, y si para llegar a eso, tiene que pasar un año en el felpudo, lo lógico es que la gente acabe abandonando, porque jugar al golf, es algo muy muy diferente a estar tirando bola tras bola.
Lo he dicho muchas veces, y lo seguiré diciendo, que quizás tecnologías como Trackman o Flightscope es lo mejor que le ha pasado al golf en años, porque es lo que ha hecho que la enseñanza esté pasando de enseñarse en función de antiguas suposiciones a enseñanza basada en hechos, y cuando más rápido se produzca este cambio en los tee de prácticas de los campos de nuestro país, es posible que más se aprovechen las clases de los alumnos y más se pueda reducir el tiempo que cada nuevo federado tarda en salir al campo, pero ojo, que hay todavía mucha, mucha enseñanza basada en cosas que a día de hoy se han demostrado ser absolutamente falsas.
Quizás lo que más enganche en el golf, más que la competición, es verse capaz de pegar buenos golpes, y para eso, cuanto mejor y más claros sean los conocimientos que se imparten, menor sea la tasa de abandonos en nuestro deporte. Tampoco debiéramos en este punto olvidarnos, que quizás una buena parte de estos jugadores, podrían sacar tanto o más rendimiento al tiempo y dinero invertido, si una parte de este, fuese destinado a la mejora de su condición física.
Tengo que reconocer, que es por todo lo anterior, que los cambios que se han dado en la PGA de España desde hace un par de años a hasta ahora, son lo que me hacen creer que ese cambio es posible, que algo está cambiando en la enseñanza y que cuantos más alumnos se pueden beneficiar de la enseñanza basada en hechos, menor será la tasa de abandono, aunque también considero que en la enseñanza debieran cambiar más cosas, para presentar un producto más atractivo a los jugadores que hace tiempo que no reciben clase alguna.
Nota: agradecimientos a la Real Federación Española de Golf por darme el dato requerido. Muchas gracias
