Inbee Park gana su tercer grande del año: ¿cuál es su secreto?
Ayer Inbee Park conseguía la tercera victoria en un grande de este año, al imponerse en el US Open 2013, algo que sólo había estado al alcance de dos personas hasta ahora: Babe Zaharías y Bobby Jones. Ni Tiger Woods, ni Jack Nickalus, ni Walter Hagen, ni Ben Hogan, ni Nick Faldo, ni Annika Sorenstam ni Lorena Ochoa habían conseguido lo que la koreana, Inbee Park, consiguió ayer al proclamarse campeona del US Open 2013.
Ayer durante la retransmisión o lo que pudimos ver de esta, me preguntaba porque era posible que el golf femenino haya pasado por épocas, en las que una jugadora es capaz de dominar el circuito, como hizo en su momento Anika Sorenstan, Lorena Ochoa o Yani Tseng, mientras que en el golf masculino, tan sólo el mejor Tiger Woods ejerció en su momento semejante dominio, sin llegar a ganar los tres primeros grandes de la temporada en un mismo año.
Quizás al ver a Inbee Park jugar, sorprende porque no parece que haga nada del otro mundo, sin embargo sus estadísticas simplemente son estratosféricas: 74% de driving accuracy, 71% de greenes en regulación, 1.702 Putts per GIR; 28.43 Putting average o 69.67 de Scoring average.
Unos números impresionantes para la jugadora que domina el golf femenino, pero ¿qué pasaría si esos mismas estadísticas las intentamos comparar con las del PGA Tour? Está claro que no vamos a comparar las distancias con el driver, pero me ha parecido interesante, comparar aquellas estadísiticas que me parecen más comparables entre sexos, a pesar de no estar jugando los mismos campos ni las mismas distancias, y que además, sean ofrecidas por el PGA Tour y por el LPGA.
A pesar de que no es de las mejores en el driving accuracy (45), su 74% la situaría a la cabeza del ranking de driving acuracy del PGA Tour. Su 71% de greenes en regulación (15) le darían la tercera posición en el PGA Tour. Su scoring average de 69.67 (1) que le da la primera posición le serviría para la séptima posición en la misma estadística del PGA Tour. Y la que quizás es una de sus fortalezas, el putting average 28.43 (1), tan «sólo» le permitiría estar en la posición número 17 del putting average del PGA Tour.
Quizás es un ejercicio que no tenga sentido el comparar unas con otras, pero a mi juicio, creo que nos puede servir para intentar comprender porque un circuito es más fácil de dominar que el otro. Para ello, vamos a comparar las estadísticas de GIR, scoring average y putting average para la posiciones décimas y vigésimas de cada una de esas estadísticas dentro del LPGA y la posición que le correspondería en el PGA Tour. No compararemos el driving accuracy, porque como pudimos ver en el caso de Inbee Park, es una estadística en las que las mujeres ganan por goleada a los hombres.
Si hablamos de GIR, la jugadora en posición décima con un 72,5 % y la jugadora en posición vigésima con un 71% les permitiría estar en el top 3 de dicha clasificación, que domina Graham DeLaet con un 72.64% de los greenes en regulación.
Si hablamos de scoring average, la décima jugadora en dicha estadística tiene un registro de 70,72 que no le servirían para estar entre los 50 primeros del PGA Tour en dicha estadística, mientras que la jugadora en vigésima posición con un 71,41 de scoring average bajaría hasta la posición 130 de esa misma estadística. ¿Dónde está la clave entonces?
La clave no es otra que el putting. La jugadora en posición décima tiene un putting scoring de 29.98 que el PGA Tour le valdrían para conseguir la posición 62 y la jugadora en la posición vigésima, con su 29,31 tan sólo le serviría para estar entre los 101 primeros de dicha estadística. Recordad, que los números de Inbee Park aquí la permitían estar en la posición décimo séptima dentro del PGA Tour.
Algunos pensaréis que no son extrapolables o comparables unas estadísticas a otras, pero a mi juicio, nos pueden dar una muestra de la superioridad del PGA Tour frente al LPGA a la hora de puttear. Inbee Park presenta unas estadísticas de putt, que le servirían para pelear en el PGA Tour una vez que estuviese en green, pero que no se puede extrapolar al resto de jugadoras del LPGA. El nivel de competencia a nivel de putts en el PGA Tour es brutal comparado con el LPGA, sacándole el líder de esta estadística Brian Gay 1.14 putts por vuelta a la líder de esa estadística en el LPGA. Si bien es cierto, que también en un circuito, el LPGA, el número de greenes en regulación también es bastante superior al del PGA Tour.
La dominación de Inbee Park se produce con el putter, estamos ante una auténtica máquina de puttear, a la que le parece que la presión no le causa ningún tipo de estragos. Pero a la vista de las estadísticas, también podemos pensar, que su dominación puede .estar provocada, porque domina un golpe, el putt, en el que sus compañeras, todavía tiene un margen importante de mejora. Entre la posición 1 y la 11 del PGA Tour tan sólo hay una diferencia de 0.1 golpes, mientras que entre la 1 y la 10 del LPGA hay 0.55.
Quizás algunos no estaréis de acuerdo, quizás el mejor porcentaje de GIR en el LPGA tour sea la clave de las diferencias en las estadísticas de putts, pero al menos a mi, creo que me ha servido para encontrar una clara explicación de porque Inbee Park puede estar dominando el golf femenino como lo está haciendo.