En la primera ronda del U.S. Open 2013, Sergio García ha firmado un resultado de 73 golpes, 3 por encima del par del campo. No se puede calificar de bueno, pero tampoco es malo si atendemos a todo lo que en el ámbito extradeportivo ha sucedido con Sergio en los días previos al torneo, que a buen seguro no le habrán permitido centrarse al máximo.
Su recibimiento en el tee del 11, hoyo por el que comenzaba su vuelta, no ha sido tan malo como nos esperábamos. De momento no parece que haya ningún vídeo del momento (lo subiremos si aparece) y tan sólo cabe destacar un incidente en el recorrido con unos aficionados que le increparon, a los que la policía allí presente se ofreció a echar del campo, pero que Sergio pidió que no lo hicieran porque eso sólo empeoraría la situación. Hoy su partida empieza en el hoyo 1, por lo que habrá que ver si la reacción del público allí presente va en la misma línea o es diferente, para bien o para mal.
El estado del campo, por el mal tiempo y la tromba de agua caída, tampoco permitían hacer maravillas, cosa que se ve reflejada en el resto de resultados. De los jugadores que han completado los 18 hoyos, el -3 de Mickelson ha sido la mejor tarjeta en casa club y Luke Donald marchaba con 4 bajo par que aún hay que rematar. Sí, sí, ya sé que «mal de muchos, consuelo de tontos», pero aquí gana el que menos hace y 6 golpes de diferencia con respecto a la cabeza del torneo actual son recuperables.
Lo mejor de todo es que Sergio García fue capaz de aguantar en una vuelta que pronto se puso muy fea, tras un fuera de límites en el hoyo 14, su cuarto hoyo jugado, y otra bola «out» en el 15, que le llevaría a firmar doblebogey y cuadruplebogey en estos hoyos. Estos resultados nos hicieron temer lo peor a muchos aficionados, era una situación de «camina o revienta», que apuntaba a la madre de todas las forradas en un campo que no estaba regalando precisamente nada, pero el de Borriol peleó contra todos los factores externos e internos y sacó esa garra que tanto nos gusta para lograr bajar tres golpes en los dos primeros hoyos del front nine: birdie al 1 y eagle al 2, que nos hacían saltar del sillón a más de uno.
Sergio volvía al torneo y tocaba seguir empujando para pescar algo más. Un bogey en el hoyo 4 enfriaba la remontada, pero dos birdies más, en el 8 y en el 10, le devolvían de nuevo a una posición razonable en la clasificación provisional y llenaba de esperanza a los fans.
Sacando esos dos hoyos fatídicos en la vuelta de Sergio García, el resultado hubiera sido bien distinto. Es cierto que en golf siempre cuentan los 18 hoyos, no nos engañemos, pero eso significa que en el resto ha estado a un buen nivel, acumulando un resultado de -3. Habrá que ver como termina la primera jornada, en la que aún tienen su que terminar varios jugadores para ver en qué puesto finaliza exactamente y a cuantos golpes de la cabeza. De momento, su posición en la mitad de la tabla de clasificación y a 6 golpes del líder no es tan mala como parecía cuando Sergio pinchaba la bola en el tee del 16. Toca animar y decir eso de #GoSergio.
