A pesar de que Phil Mickelson tiene una victoria este temporada, su año no está siendo brillante, aunque quizás simplemente sea porque de alguien que tiene tanto talento como él Mickelson siempre esperamos que esté ahí arriba.
Si hubiéramos realizado la quiniela de favoritos para este U.S. Open 2013 antes de este fin de semana, muchos no habríamos incluido a Phil en nuestra lista de ganadores potenciales, por mucho que seamos conscientes de que en cualquier momento la magia de Phil Mickelson puede hacer acto de presencia y situarse en los puestos que optarán por la victoria del domingo.
Ayer durante la disputa de la última jornada del Fedex St. Jude Classic pudimos ver a Phil Mickelson en estado puro, ese que juega golpes que sólo algunos privilegiados pueden ver. El tiro que se jugó desde debajo de los árboles o su último tiro al 18 y pidiéndole a la bola que entrase cuando esta iba por el aire, son obras maestras del golf. No obstante, creo que no sólo es la calidad que atesora, si no la intensidad con la que vive esos golpes, los gestos, las miradas.
Phil Mickelson ha dejado claro ayer que no nos debemos olvidar de él para este U.S. Open, ya que a poco que sea capaz de llegar con el putter calentito, es más que posible que nos lo encontremos en uno de los partidos estelares de este domingo, lo que a buen seguro sería garantía de emoción y golf de muchos kilates.
La carga de Phil Mickelson ayer no sería finalmente suficiente para llevarse la victoria en el Fedex St.Jude Classic ,que finalmente caería del lado de Harris English. Para aquellos que no pudisteis ver el final de ayer, aquí os dejo un resumen con lo mejor de la última jornada.
