Si hay algo que saben hacer bien los organizadores de los torneos grandes, como el Open Championship, es dar espectáculo desde el tee del hoyo 1. Es ya un clásico en este tipo de torneos que haya una persona con micrófono en mano para presentar a los jugadores y una grada repleta de público alrededor del primer tee, para aplaudir a rabiar a cada uno de los profesionales que van pinchando su bola para iniciar el torneo.
Ser el primero de todos tiene que ser especial. Te tienes que sentir la persona más importante del mundo, el que va a golpear primero en un torneo con una categoría especial. En el breve vídeo que acompaña a esta entrada se puede ver el ambiente que había cuando el mítico presentador, Ivor Robson, iniciaba el ritual. Allí estaba ya todo el mundo atento a lo que pasaba y aplaudiendo con entusiasmo. Eran las 6:25 horas, aún de madrugada. Otro motivo por el que da gusto ver el golf en el Reino Unido.
Vía | The Open
