Qué el golf en España no está pasando una buena época es evidente si miramos a la evolución de las licencias de golf en España, aunque la preocupante situación no parece obvia si miramos a otros lugares, sin embargo, en los últimos días, he visto algo que realmente me ha hecho preocuparme todavía más, aunque quizás, sólo sea un hecho local de Gran Canaria y no sea extrapolable al resto de lugares.
Hace un par de días visitaba el Decathlon que tenemos en Gran Canaria y observaba como los metros cuadrados que tenía disponible el golf había sido dramáticamente reducido si lo comparábamos con el espacio que tenía anteriormente, lo cual, se añade a que era el segundo cambio de ubicación que tenía la sección de golf en no demasiado tiempo.
Me había quedado con ese poso en la cabeza, hasta que esta mañana me acerqué al Centro Comercial de El Corte Inglés en 7 Palmas, donde pude comprobar que la sección de golf de dicho centro comercial simplemente había desaparecido, hecho que confirmé con el propio personal de El Corte Inglés para no equivocarme, confirmándome ellos, que el otro centro de El Corte Inglés en Las Palmas si que mantenía dicha sección, pero que en este, simplemente había desaparecido.
De la sección de golf de El Corte Inglés de 7 Palmas, reconozco que tan sólo guardo malos recuerdos por una garantía de unos palos Callaway hace ya casi diez años, no siendo cliente de ellos por el mal trato dado en aquel momento y por lo reducido de su stock. Pero más allá de experiencias personales, que dos grandes superficies de Gran Canaria, disminuyan los metros cuadrados que destinan al golf es una mala noticia para todos los que amamos el golf, porque si profesionales de la distribución como los ejemplos citados, consideran que no es rentable cederle tantos metros o incluso eliminarlo de alguno de sus centros es porque el golf no vende o no vende los suficiente para rentabilizar dichas inversiones en material y espacio.
Reconozco que entre el trato recibido en las tiendas especializadas en golf y las secciones de estas grandes superficies, al menos por mi experiencia, no tiene nada que ver, ganando siempre los primeros, pero no por ello deja de preocuparme, ya que estas grandes superficies son visitadas por personas interesadas en el deporte, y que no se vea tanto el golf en ellas, no se hasta que punto puede repercutir en la imagen y presencia de nuestro deporte, ya que su ausencia en estos lugares, provocará que nuestro deporte sea menos visible para el gran público y nos sigamos ennichando…
No es menos cierto, que para las tiendas de golf de la isla puede ser una buena noticia, ya que visto lo visto con la evolución de las licencias en la isla, lo único que se estaba produciendo era un mayor reparto del pastel, ya que la tarta no crecía, si bien es cierto, que durante los últimos años, la tienda especializada ha incrementado mucho la experiencia del cliente, implementando fittings de las principales marcas cada cierto tiempo, cuando en los años de vacas gordas estos no existían…
Otra reflexión al respecto, es como habrán podido afectar los ciclos de vida tan corto de los productos de algunas marcas en la decisión de las grandes superficies de la isla, ya que la combinación de baja rotación con modelos desfasados y erosión de márgenes, al mismo tiempo que la competencia da un mejor servicio, también ha podido resultar crucial, para el desenlace que el golf puede estar teniendo en las grandes superficies de la isla. Aunque si el golf vendiese más de lo que vende, a buen seguro que no le reducirían espacio, pero para poder vender artículos de golf, se necesitan golfistas, y de eso, como nos demuestra la evolución de las licencias, cada día tenemos menos…
Yo creo que también es una consecuencia de que en el comercio de golf se necesita algo más que vender producto sin más, siendo la componente del servicio clave en este sector. Al visitar la sección de golf de alguna gran superficie generalista lo que me he encontrado casi siempre es una sección atendida por alguien que no juega al golf, lo que no ayuda para nada a generar ventas. Además, su punto fuerte solía ser «la disponibilidad de stock» que no abarcaba a todos los jugadores y se centraba demasiado en el jugador de nivel medio-alto. Vamos, que si te ibas a comprar un driver allí sólo tenías el de 10,5 grados, varilla regular en grafito estándar y nada más. Si querías personalizar el palo, tenías que recurrir a otro comercio o cambiar de canal.
A dónde quiero llegar con todo esto es que si por la crisis cuesta vender cualquier producto de golf hoy, con la alta rotación que promueven las marcas, la cosa de pone aún más complicada. Por el hecho de no tener personal cualificado, por tener stock en un sector en el que el cliente exige personalización del material y seguramente por otras razones, estoy seguro de que no se vende nada de golf en grandes superficies hoy en día y me parece una decisión lógica, si se atiende a criterios de rentabilidad.
Por último, un apunte de este verano: quería cambiar unos grips y me fui a Decsthlon, en donde una chica muy amable me dijo que me los cambiaba ella y por un precio bastante razonable. Le lancé un par de preguntas para ver si sabía algo de golf o no y vi que no tenía ni idea del tema, sólo el habían dado un curso de formación para cambiar grips y atender a un cliente de golf. Muy maja y todo eso pero yo prefiero que me cambie los grips alguien que sepa que hay que colocar ciertas marcas del grip alineadas con la cara del palo para que al colocarte a la bola tengas en todos la misma referencia. Eso es lo que me ofrece una gran superficie, así que me voy mejor a la tienda de golf especializada o a la de cualquier club.