Hace tiempo que Sergio García me había aburrido, que me había hecho perder la ilusión y la esperanza en él, por su actitud en el campo, por ver como uno de los jugadores más talentosos del golf mundial no era capaz de sacarle provecho o tiraba por la borda todo ese talento que atesoraba.
Sin embargo, a mediados de diciembre Sergio García se imponía en Tailandia frente a Henrik Stenson en un torneo en el que su novia le hacía de caddie. En aquel entonces ya hablábamos del importante cambio de actitud que habíamos visto en Sergio García, lo cual unido a su brutal talento, provocaba que al menos yo, volviese a disfrutar viendo jugar a Sergio García.
En las dos jornadas disputadas del Accenture Match Play he vuelto a ver a ese Sergio García, al que le pueden salir más o menos bien las cosas, pero al que le ha acompañado una gran actitud, un Sergio García que convive de una manera más tranquila con sus aciertos y con sus errores y que por ahora, le ha servido para pasar las dos primeras rondas.
Hoy le toca jugar contra Ricky Fowler, que ayer fue capaz de deshacerse del golfista más en forma de estos momentos Jimmy Walker, por lo que esta tarde noche en España, a buen seguro que podremos disfrutar de un partidazo match play entre estos dos jugadores. Un partido que no me voy a perder por nada del mundo.
A mediados de diciembre ya comentaba que si esta versión de Sergio García se mantenía en el tiempo, tendríamos que tenerlo muy en cuenta para la temporada 2014. Sigo pensando lo mismo, este nuevo Sergio García al menos a mi me ilusiona, me hace confiar en sus posibilidades para luchar por la victoria en grandes eventos como el Accenture Match Play, y se lleve la victoria o no, hacía tiempo que no tenía ilusión por seguir un partido de Sergio García como el de hoy.
