Hace poco surgía una conversación en Twitter entre golfistas españoles de categoría amateur, en la que sacaban a relucir el tema del juego lento en el golf. Uno de ellos se quejaba de en una vuelta de cinco horas es complicado hacer un buen resultado, dadas las constantes esperas para jugar y el atasco constante que desespera al jugador de golf de hándicap de una cifra. Tras un intercambio de mensajes, me llamó la atención que no llegaban a una conclusión clara de quién es el responsable del juego lento, es decir, dónde se encuentra la causa raíz de este grave problema que afecta al golf.
El caso es que en ningún momento salió en la conversación como posible causa el jugador, que es quien al fin y al cabo pincha la bola en el tee del uno para jugar cada ronda de golf. Es cierto que ayuda el hecho de disponer de un buen sistema de logística en el campo, es decir, unos buenos procedimientos y profesionales (master caddy, marshal, entre otros) que los pongan en práctica durante las jornadas de juego. La buena gestión de las salidas al campo y del ritmo de juego, son claves a la hora de lograr un buen resultado en cuanto a tiempo de juego, pero no podemos olvidar que son las personas las que juegan y las que, por tanto, marcan el tiempo de una vuelta.
Creo que nos falta hacer un poco de autocrítica a todos los que nos acercamos cada fin de semana a jugar un torneo o una partida con amigos, para intentar darnos cuenta de que a lo mejor podemos contribuir un poco a esa mejora del ritmo de juego que tan necesaria parece últimamente. A lo mejor podemos contribuir prestando un poco más de atención al orden de juego, a no pensar tanto los golpes, a ayudar con la trayectoria de la bola de los demás jugadores y a no perder de vista la nuestra y seguro que a unos cuantos pequeños detalles que pueden pasar desapercibidos pero que también suman.
También podríamos pensar en ayudar a los que empiezan, para que vean la importancia de «ir enchufado» por el campo, prestando atención a lo que hay por delante y lo que viene por detrás. Ayudándoles a saber estar hoy, se consiguen jugadores que cumplen las reglas de etiqueta mañana. Todos empezamos alguna vez, todos hemos cometido errores por el campo, así que tener paciencia y buena educación con los novatos seguro que es una mejor inversión que las malas formas o la impaciencia.
Y tú, ¿eres parte del problema o parte de la solución al juego lento?
Imagen | Tpsdave
Una verdad como un templo.