Estrenamos formato de entrada para estos días de Masters, comentando nuestra elección del que para nosotros es el Jugador Balneario de Mondariz, es decir, el más destacado en la primera jornada del Masters. Se trata de Tianlang Guan, joven jugador chino que debutaba ayer en el Masters a los 14 años, dejando completamente obsoleto el récord que hasta ese momento tenía Mateo Manassero, quien se había estrenado en el torneo con 16 años.
Su primera vuelta acabó con 73 golpes, una por encima del par del campo, gracias al birdie con el conseguía cerrar su vuelta. Ahí es nada, +1 en tu debut en el Augusta National, a los 14 años y acabando con birdie. ¡Olé! Alucinante me parece que un crío de esa edad pueda tener ese nivel de juego, que pueda mantener el tipo en ese campo y ante toda esa gente, pero al mismo tiempo mentiría si dijese que no hay cosas que me preocupen y me hagan preguntarme sobre como se llega hasta ahí a esa edad.
Estaremos de acuerdo que para llegar como ha hecho Tianlang Guan hay que tirar muchas-muchas-muchas bolas, todavia siendo un niño. Como me comentaba Rafa Cabrera Bello esta semana en el tee de prácticas de mi club, habría que ver como sus articulaciones, rodillas y manos van respondiendo a ese entrenamiento tan intenso desde tan pequeño.
No es menos cierto que si Tianlang Guan llega hasta ahí, habrá otros muchos en China que no llegarán a los principales circuitos, aún habiendo entrado en esos mismos planes de entrenamiento, y el esfuerzo al que su cuerpo ha sido sometido quedará ahí. No obstante, cometería un error de bulto en toda esta observación, si no tuviese en cuenta sus orígenes y las expectativas de futuro que hubiese tenido, tanto profesionales como personales, si el golf no se hubiese cruzado en su camino.
No he encontrado apenas datos sobre la historia de Tianlang Guan pero, si fuese hijo mío, considero que ahí estaría la clave: aceptar o no el riesgo de dicho entrenamiento a esa edad. Tianlang Guan se ha desplazado hasta Augusta acompañado por su padre y su madre, junto con un pequeño grupo de amigos entre los que se encuentra el propietario del campo donde Tianlang Guang suele jugar. De esta manera, entiendo que estarímos hablando de un chico que, si no hubiese encontrado al golf, tendría otras opciones a su alcance.
Desde fuera es complicado o iluso el intentar evaluar todo este proceso. Primero, porque casi no hay datos del entrenamiento seguido para haber llegado a este nivel y, en segundo lugar, porque será el paso del tiempo el que nos vaya dando respuestas. Eso sí, talento y determinación no le faltan a este joven jugador llamado Tianlang Guan. Él podría ser ese factor detonante para que la pasión por el golf explosione en China, uno de los grandes sueños de todo el mundo que tiene sus intereses en el golf, por la cantidad de dinero que ese mercado generaría.
Imagen | PGATour
