¿Qué le falta al golf femenino profesional en España?
Tras leer sobre el desarrollo y desenlace del Campeonato de España Femenino de Profesionales, se me vienen a la cabeza una serie de preguntas que puedo resumir en una y que es la siguiente: ¿Qué le falta al golf femenino profesional en España?.
Tenemos a Carlota Ciganda, a Belén Mozo, a Beatriz Recari, a Tania Elósegui, a Marta Silva y a otras buenas jugadoras profesionales pero cuando toca jugar el Campeonato de España de Profesionales Femenino (que no el Open de España), resulta que participan 26 jugadoras, de las cuales 5 son amateurs y una de ellas, Ainhoa Olarra, acaba ganando el torneo tras un playoff a tres bandas que también fue disputado por otra de las jugadoras amateurs en concurso, Natalia Escuriola.
La victoria de Ainhoa Olarra es de esas de sacarse el sombrero, a los últimos 9 hoyos me remito (resultados hoyo a hoyo). Las vueltas de las primeras 11 clasificadas se pueden calificar de bastante razonables, buenas para las primeras y no tanto a medida que se desciende en la clasificación. Desde la mitad de la tabla y hasta el final, los resultados no invitan al optimismo con el golf femenino español a corto plazo.
¿Qué le falta a la cantera del golf femenino español? ¿Tenemos que conformarnos con un grupo reducido de jugadoras que pueden llegar a jugar con las mejores del mundo y esperar a que se puedan ir a Estados Unidos a buscarse la vida y les vaya bien allí? ¿Es esa la única apuesta del golf español femenino? ¿Hay otras opciones posibles? ¿No hay más cantera o es que no lo sabemos hacer mejor?
A donde quiero llegar es al por qué de unos resultados tan pobres en un torneo como el Campeonato de España Femenino de Profesionales que, en mi opinión, debería ser algo más grande. Y no lo digo por las vueltas cosechadas, sino porque parece que hay pocas jugadoras y poco interés por el torneo ¿O no?
Imagen | RFEG
A mi me parece que hay poco interés en España por el golf femenino. Sólo hay que ver la escasa afluencia de público al Open de España Femenino cuando se celebra en Madrid, ciudad en la que se supone que hay más federados que en ninguna otra de la península. Con respecto al campeonato de España de profesionales, las participantes se pueden dividir en dos grupos: niñas y dinosaurios (con todos mis respetos, no es mi intención ofender). Es lo mejor que puede ofrecer el golf femenino español cuando se trata de torneo con poca pasta en premios. Las golfistas de primer nivel no vienen y las de segunda división (promesas y dinosaurios) son las que se han apuntado al torneo. No hay más.